Velada Ultraísta en los salones de Parisiana. RCA, que ya estaba alejado, y bastante harto de los ultraístas, no asiste.
Se siente cada vez más reacio para acudir a la tertulia del Colonial.
Ramón le escribe: «Deje usted esa pegajosería [sic] del Ultra y véngase a Pombo conmigo, que soy el único capaz de apreciarlo… ¿Es que cree usted en el talento de ese Rivas Panedas, que parece un mendigo cojo, o de ese Guillermito de las orejas como ventiladores? ¿Qué pueden darle a usted esos tipos?». Por otra parte, en una de sus últimas publicaciones, hizo una reseña del banquete celebrado en honor de RCA en Casersa diciendo que él se retiró de allí, no por desafección a Cansinos, sino porque realmente «sus amigos eran de inferior calidad».
La novela de un literato: «Velada ultraísta» y «Adiós al Ultra».
V-ltra, 27/1/1921, n.º 1, página 4.